Comunicado enviado a la CIDH por correo electrónico.
Desde la Asociación de Cubanos en Cataluña José Martí, nos
sentimos indignados, al leer el Informe Final del Panel Independiente para
Evaluar Candidaturas a los Órganos del Sistema Interamericano de Derechos
Humanos, de mayo 29 de 2025, realizado por la secretaría del Panel (American
University Washington Collage of Law).
En dicho informe se expone la propuesta de Rosa María Payá Acevedo. En el mismo encontramos un análisis superficial sobre la propuesta; la cual no nos asombra en lo mínimo que venga bajo el paraguas del Departamento de Estado de Estados Unidos.
Sin embargo, en el propio anuncio realizado en la web del
Departamento de Estado, se usa un argumentario falso, ya que el padre de Rosa
María, Oswaldo José Payá Sardiñas,
falleció el 22 de julio de 2012, por la conducción temeraria e irresponsable
del señor Ángel Francisco Carromero Barrios, español, entonces dirigente de
Jóvenes Generaciones del Partido Popular, que visitó Cuba y que durante sus
actividades ilegales dentro del país, provocó un accidente, al impactarse contra un árbol en un tramo de la carretera Las
Tunas-Bayamo, en la localidad de Las Gabinas, provincia Granma, donde
también falleció el ciudadano cubano Harold Cepero Escalante.
Es justo señalar, que el propio Cónsul General de España en Cuba, el señor Tomás Rodríguez
Pantoja, consideró entonces que el juicio celebrado contra el señor Ángel
Carromero fue, según sus propias calificaciones, de "correcto", "limpio"
y "procesalmente impecable". Además, según sus propias
palabras, aseveró que en dicho proceso se respetó “todas las normas del proceso".
Sin embargo, la señora Payá prefirió
mentir al respecto e inició una campaña para responsabilizar al gobierno cubano
(guion acordado con diplomáticos estadounidenses en Cuba, a cambio de visados del programa de refugiados políticos, para ella, su madre y
dos hermanos).
Igualmente, el Departamento de Estado de EEUU miente al
afirmar que la señora Rosa María Payá unió a la sociedad civil cubana; porque
en ningún momento su “activismo” tuvo repercusión alguna dentro de la sociedad
cubana. Además, su Organización denominada “Cuba Decide”, devenida del
fracasado “Proyecto Varela” que “dirigió” su padre, ha sido financiada por la National Endowment for
Democracy (NED), a su vez pagada por la Agencia de los Estados Unidos para el
Desarrollo Internacional (USAID), una oficina del Departamento de Estado de
EEUU.
Es el pueblo de Cuba el que verdaderamente decide
sobre el camino de la nación y eso se certificó en la participación de la
sociedad cubana en la discusión, análisis y finalmente aprobación del Proyecto
de Lineamientos de la Política Económica del país, en abril de 2011 y se
ratificó en el proceso de discusión y aprobación de la nueva Carta Magna del
país, puesta en vigor en 2019. Ejercicios que demuestran la arraigada cultura
de participación popular dentro de Cuba, desde enero de 1959.
Por tanto, vemos incongruente la valoración expresa en el
Informe del Panel, ya que no vemos como cierto que la señora Rosa María Payá
Acevedo tenga “una alta moral”, sino que más bien carece totalmente de ella, ya
que se subordina a intereses colonialistas; lo que la desprovee de esa “imparcialidad”
tan solicitada por la SIDH. Está a millas de distancia de ser independiente, de
ser imparcial y de tener ausencia de conflictos de intereses.
El activismo de Rosa María Payá no ha estado enfocado en
solventar o fortalecer derechos del pueblo cubano, ya que su “activismo” ha
estado centrado en codearse con mercenarios ex integrantes de la Brigada
invasora 2506, con políticos corruptos como Bob Menéndez, con rancios
reaccionarios de EEUU (Ileana Ros-Lehtinen o Mario Díaz-Balart) y de Europa
(Partidos de derecha y ultraderecha); incluso, en reunirse con golpistas como
Jeanine Añez, quien utilizó la represión desmesurada y bajo sus órdenes se
cometieron masacres en
Sacaba y Senkata.
Además, Rosa María Payá ha solicitado, en cada espacio que
participa, una política más agresiva de asfixia económica contra Cuba: un
reflejo de seguir el guion del criminal bloqueo económico impuesto por EEUU
contra el pueblo cubano, que ha sido condenado y rechazado, por mayoría
indiscutible, por más de 30 ocasiones en la Asamblea General de las Naciones
Unidas.
La propuesta del Departamento de Estado de EEUU viola, con
su propuesta, los artículos 1 y 3 del Reglamento de la CIDH, porque la señora
Rosa María Payá mintió de forma burda, en 2024, frente a la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado de
España, al acusar al gobierno cubano de aplicar la tortura e hizo alusión a “otras metodologías que han terminado por sustentar otras dictaduras en
nuestro hemisferio”; sin embargo, en ningún momento ha condenado las
dictaduras latinoamericanas que sí azotaron la región (Batista en Cuba,
Pinochet en Chile, Stroessner en Paraguay, Videla en Argentina, Banzer en
Brasil, Somoza en Nicaragua, etc.) con torturas, asesinatos y la desaparición
de decenas de miles de personas y que todas fueron apoyadas por EEUU.
Es llamativo que califiquen a Rosa María Payá de
tener “alta moral”, cuando participó en el V Foro
Regional Juventud y Democracia, desarrollado en México en 2017, y en ningún
momento ella condenó los más de 33 mil desaparecidos, incluidos los 43
normalistas de Ayotzinapa, ni se pronunció sobre los derechos de las víctimas,
familiares y del pueblo de este país.
¿Cómo esta señora puede acusar a Cuba
de violar derechos, cuando antes de decidirse a viajar, ella tuvo acceso
gratuito a todos los beneficios sociales que brinda el socialismo en Cuba y
nunca se le discriminó por su “activismo”?
El “conocimiento” que la señora Rosa
María Payá tiene sobre temas de DDHH, realmente está supeditado a
intereses foráneos de colonización, de apoyar las presiones injerencistas o la
intervención militar extranjera, para generar cambios políticos que desencajan
con la voluntad del pueblo cubano.
¿Cuándo la señora Payá ha realizado algún reclamo que esté
dirigido a mejorar las condiciones económicas del pueblo cubano y que no sea
aplaudir esa política agresiva que los diferentes gobiernos de EEUU han
mantenido y arreciado durante estas últimas 6 décadas?
Puede que posea “conocimientos” del sistema legal de Estados
Unidos, incluyendo el abordaje del derecho internacional en el derecho interno
y las posiciones de Estados Unidos con relación a las obligaciones legales
internacionales y otros compromisos internacionales en el ámbito de los
derechos humanos; pero ello demuestra su inclinación a la complicidad de la
política internacional belicista e injerencista de EEUU; ya que este país no ha
firmado muchos de los acuerdos internacionales en esta materia. Eso solo
certifica que es neófita en las normas, jurisprudencia o doctrina del derecho
internacional de los derechos humanos.
Por lo anterior expresado, la Asociación de Cubanos en
Cataluña José Martí impugna la propuesta de EEUU y rechaza de forma enérgica
que la señora Rosa María Payá sea “premiada” con tales responsabilidades en la
CIDH, a partir del próximo 27 de junio: una propuesta de EEUU que es manejada más
por intereses ajenos al respeto de los derechos a la soberanía, independencia y
autodeterminación del pueblo de Cuba y del resto de los pueblos del mundo.
Asociación de Cubanos en Cataluña José Martí
20 de junio de 2025
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